el fogon de meg

La cocina donde se elaboran las artes culinarias, la Historia, la medicina, los alimentos, las escuelas gastronómicas, y, por supuesto, las "fórmulas magistrales". O sea, las recetas.

miércoles, 15 de febrero de 2012

ALIMENTOS CON HISTORIA



EL GIN TONIC


   El principal ingrediente de esta bebida que podemos considerar aristocrática, es  el agua tónica. Su contenido de quinina la hizo producto medicinal imprescindible para los soldados británicos que iban a la India y a lugares exóticos, y les protegía contra la malaria y otras enfermedades. 

   Todo empezó en 1783, año en que  Johan Jacob Schweppe, un joyero alemán que vivía en Ginebra y que nada tenía que ver con la gastronomía ni con la enología.  Es quien tuvo la ocurrencia de añadir anhidrido carbónico y azúcar al agua envasada que llevaban en sus mochilas  como medicina, los soldados británicos. 


   Dado el éxito, creó su propia compañía y la bautizó con su nombre: Schwweppes & Co. que, a la bebida de quinina añadió soda carbonatada de naranja, creando así  una bebida que además de refrescante era un medicamento para combatir el paludismo. Algunos expertos aseguran que la mezcla del zumo de limon con el agua tónica puede hacer  disminuir el efecto de la quinina y por tanto  la hace menos efectiva contra el paludismo, concretamente.

   El IMperio Británico acabó  extendiendo la bebida  por todo el mundo, dadas sus ventajas medicinales, especialmente en la India donde la malaria hacía estragos entre la poblacion y entre los soldados. La bebida, en principio, no fue  bien aceptada en principio por su sabor amargo y de ahí surge la idea de mezclarla con ginebra para eliminarle el amargor o al menos reducirlo. Se dice que la primera ginebra que se utilizó y que debe utilizarse hoy era la Bombay.  Parece que fue un soldado quien tuvo la ocurrencia de añadir la ginebra, lo que convirtió la bebida , además de medicina, en refrescante cóctel que ha llegado hasta hoy. 

   La receta más común del Gin Tonic es la mezcla de Ginebra BOmbay con una cucharada de azúcar y unas gotas de zumo de lima o limón. Se añade el agua tónica  y se enfría con cubitos de hielo. Se sirve con una rodaja de limon clavada en el borde del vaso y, según gustos, con una paja para poder beberla a traguitos.

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